Samson y Priscilla Retnaraj | Sirviendo en Nepal
A medida que el año llega a su fin y estamos casi en la semana de Navidad, nuestros corazones están rebosantes de alabanza a nuestro Señor Dios, y estamos muy agradecidos de aprovechar la oportunidad para saludar a nuestros amigos, a los que nos apoyan y familiares en la celebracion de la Navidad y dar la bienvenida al nuevo año 2025 con alegría en nuestros corazones. Comenzó con mucha confusión, y muchos de nosotros en la familia estábamos enfrentando enfermedades y sintiéndonos inseguros y perdidos debido a estar separados unos de otros por un par de años. Nuestro hijo Prateek también enfrentó algunos problemas de salud difíciles, pero los superó todos cuando finalmente se graduó en abril y consiguió un trabajo para seguir su sueño de ser consejero. Recibió un amplio apoyo de las becas de EFM y de las fervientes oraciones de todos ustedes. Tuvimos una gran fiesta para celebrar su graduación con la presencia de personas muy estimadas en Newberg.
Durante la mayor parte de la primera parte del año, nos tomamos un año sabático y trabajamos en diputaciones en los EE. UU. Cuando regresamos a nuestro trabajo y responsabilidades, estuvimos agradecidos de que nos hayan dado otro período de extensión. Nuestros capacitadores de CHE trabajaron duro y dos de nuestros lugares de trabajo (Chitwan y Rautahat) han iniciado centros de aprendizaje comunitarios, que nos dieron una base legal para nuestro trabajo de CHE a través del cual ahora se pueden establecer confraternidades y “comités” en estos distritos. Gradualmente, estos líderes, con sus comités, han asumido la responsabilidad del trabajo en el futuro y están en las etapas finales de tener un centro bien equipado físicamente para ayudarlos a integrarse con la comunidad.
Nuestro entrenador de CHE en Aurahi, el Sr. Arun Mandal, enfrentó muchas dificultades inicialmente debido al accidente en el que casi perdió la vida y, posteriormente, su recuperación se ralentizó debido a complicaciones en el proceso de curación física y mental. Pero estamos contentos de compartir que esto simplemente fortaleció su fe en Dios y, por gracia, milagrosamente, su
trabajo creció a lo largo de los meses de este año. Se sometió a una cirugía nuevamente para quitar los implantes y volver a insertar una placa ósea porque la curación fue lenta.
Miramos hacia el nuevo año sin temor y confiados en que “el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús”. Estamos agradecidos a todos por mostrarnos tan maravillosamente su amor al apoyarnos con sus oraciones y cuidado.
¡SHALOM!
Samson y Priscilla Retnaraj
Nepal
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“Te alabaré entre los pueblos, oh Señor; cantaré de ti entre las naciones.” Salmos 59